En menos de un año, he pasado de vivir en un piso precioso con mi pareja y encontrar un trabajo que me llena más que cualquier otra cosa en el mundo...A verme soltera, en casa de mis padres, y lo último, de lo cual me he enterado hoy...sin trabajo.
La vida es cíclica. Etapas que empiezan y terminan, y empiezan, y vuelven a empezar,....Y todo pasa por algún motivo o circunstancia concretos....Al menos eso pienso.
Es cierto que la noticia me ha sentado igual que un jarro de agua fría una húmeda noche de diciembre....Pero reflexionando, he pensado que la vida me ha enseñado a perderle el miedo a los cambios. Hasta ahora, y teniendo en cuenta que soy una de las personas más miedosas del planeta, he ido aprendiendo que "quien no arriesga no gana". Poco a poco, y en algunos temas, arriesgando más que en otros (los que me conocen bien, saben a lo que me refiero, ¿¿verdad, Pani??). Pero voy perdiendo el miedo.
Quien sabe lo que nos depara el futuro, siempre he pensado que es incierto, y que la toma de decisiones que tu realices, son las encargadas de marcar tu destino. Hoy me he enterado que no volveré a mi "cole", cosa que cabía la posibilidad que ocurriese...Quien sabe lo que me depara el futuro...Lo único que sé es que pienso afrontarlo con la cabeza bien alta. Que me quedo con lo bueno, las personas que he conocido, a las que nunca olvidaré, y lo mucho que he aprendido.
Y que si en menos de un año me he visto sin pareja, casa y trabajo, es porque lo que tiene que venir debe ser alucinante. Sin cambios la vida sería tan aburrida.....
He aprendido a andar sola, a disfrutar de las pequeñas cosas, a empaparme de mis amigos, a VIVIR sin remordimientos. Las pruebas que nos pone la vida no son más que retos que superar que hacen que crezcas y aprendas. Así que aceptemos los cambios.
Y disfrutemos de ellos....sin miedo.
